Recorrieron
de noche los alrededores con linternas
buscando aquellos caminos que no les dejaba ver la luz del día.
buscando aquellos caminos que no les dejaba ver la luz del día.
Nadie
lo sabía por aquel entonces
pero
era yo quién ponía los obstáculos en mi camino
saliendo
siempre adelante
dispuesto
a superarme a mí mismo.
En
mi infierno personal
todos
los demonios tienen tu risa
yo
soy ciego
y
tú no estás.
Cuando
pasaron las cosas y el tiempo suficiente para obligarte a cambiar,
yo
buscaba algo distinto.
Por
esos imposibles que no pueden ser.
Amor
de verdad solo hay uno.
El
resto solo sirven para intentar taparlo.
Llega
un momento en el que la desesperación sobrepasa a la razón.
Aceptamos
malas explicaciones.
Olvidamos
la verdad.
Resignación.
Perdimos
los papeles
e
improvisamos la vida.
No
te mentiré,
he
sentido mucho, a veces demasiado.
Atrévete.
El
mundo es nuestro.
Llévame
hasta donde nunca nadie haya llegado.
Como
no podían imaginarlo
probaron
a sentirlo
sin
importar que fuera ya
un
camino sin retorno.
Cuando
nuestros ojos se encontraron
parecía
que gritaban:
Queremos
todo
sin
conocernos de nada.
Aprendió
a no implicarse
en
nada que no tuviera
tres
cuartas partes de vida
un
atisbo de locura
y
una esencia duradera
El
destino nos da el tiempo para cubrir la distancia que separa de los
sueños,
sin
importar, la velocidad a la que lo logremos.
Hacía
de sus cicatrices cremalleras
para
abrirlas al amor
y
cerrarlas al frío
cuando
él volviera.
De
nada sirve saber
dónde
están los puntos cardinales
cuando
no tienes a dónde ir.
Pero
ella no podía dejar de mirar su brújula
El
amor es inteligente y a la vez cobarde
porque
se esconde dónde menos te lo esperas.